A toda máquina
La Armada Argentina en Sudáfrica. Luego de tres días de coordinaciones, conferencias de planeamiento y actividades recreativas, comenzó la ejercitación Atlasur VII.
SUDÁFRICA – El miércoles pasado, en condiciones de viento fuerte y lluvia, los buques de las Armadas de Argentina, Sudáfrica, Brasil y Uruguay comenzaron la fase uno de la ejercitación multinacional Atlasur VII.
La bahía Falsa fue el escenario del encuentro inicial de las embarcaciones. A medida que zarpaban, las unidades fueron adoptando una formación en columna: SAS “Amatola”, SAS “Isandlwana”, BNS “Defensora”, BNS “Independencia”, ARA “Rosales”, ARA “Robinson”, AROU “Uruguay”, SAS “Galeshewe” y SAS “Isaac Dyoba” se fueron perdiendo en el horizonte hacia el sur.
Las operaciones de esta fase incluyeron ejercitaciones antisubmarinas y antisuperficie, prácticas de aterrizaje y despegue de helicópteros, pasajes al habla y ejercicios de comunicaciones visuales, entre otros.
Helicópteros Alouette, Linx y Esquilo realizaron demostraciones aéreas el viernes pasado
Jueves intenso
El jueves, la Fuerza de Tareas 19 incorporó al buque logístico SAS “Drakensberg” que volvía de una larga navegación en la que acompañó a dos submarinos de la clase 209 en su viaje inaugural desde Alemania. Luego, las ejercitaciones se orientaron hacia su protección en un “ambiente multiamenaza”.
“Las comunicaciones se hicieron fluidas, mejoraron las maniobras y poco a poco las tripulaciones fueron integrando su accionar en un excelente nivel de interoperabilidad”, explicaron las autoridades que dirigieron el adiestramiento.
El mismo jueves por la tarde se efectuó una ejercitación de tiro naval contra blanco al garete materializado por un "tomato killer", boya reflectora radar de seis metros de diámetro. Las unidades encolumnadas tiraron en forma independiente. La performance de los buques argentinos fue notable y elogiada luego por el comandante de la Fuerza de Tareas 19, capitán de navío de la Armada de Sudáfrica Douglas Faure.
Las últimas luces del día fueron el preludio de una ejercitación de tiro contra bengala. El grupo de tareas practicó técnicas de autodefensa colectiva antimisil. Las bengalas con paracaídas, lanzadas mediante cohetes por la fragata “Independencia”, iluminaron la noche simulando ser misiles en vuelo. La munición rasante de los buques convergió enérgicamente sobre cada bengala. Una vez más, el tiro de los buques de la Armada Argentina fue excelente y reconocido luego por los camaradas de las otras unidades participantes.
Durante la noche, la Fuerza de Tareas 19 fondeó en formación en una larga fila de frente de nueve buques a menos de dos millas de la costa. El espectáculo de sus luces flotando en la oscuridad atrajo la atención de los pobladores locales que, según pudo saberse luego, disfrutaron de la vista desde las muchas pasarelas, muelles, bares y restaurantes frente al mar que Simonstown posee.
Fase uno, concluida
La mañana del viernes fue dedicada a la difusión pública de la operación. En efecto, dos helicópteros Puma transportaron a una gran cantidad de periodistas a bordo del SAS “Drakensberg” que ingresó en la bahía Falsa como núcleo de la formación por divisiones en columna.
Los helicópteros Alouette III de la corbeta ARA "Robinson", Esquilo de la fragata “Independencia” y Super Linx de la fragata “Defensora”, luego de un pasaje rasante en formación, brindaron un espectáculo de habilidad aérea. Los fotógrafos se agolparon cuando los helicópteros se colgaron frente al buque logístico, girando, volando hacia atrás; y en el caso del Super Linx, ejecutando maniobras de acrobacia aérea.
Al atardecer, los buques terminaron de amarrar y las tripulaciones volvieron a poblar el tranquilo Simonstown. Las colas en los teléfonos públicos y las conexiones a internet se multiplicaron cuando los 800 marinos extranjeros renovaron su comunicación con sus seres queridos. Las distintas reuniones luego de las operaciones se prolongaron hasta la noche y las cenas en las cámaras se hicieron multinacionales.
Terminó así la fase uno del Atlasur VII que continuará a partir de hoy con operaciones más complejas y que culminará el próximo viernes con la entrada a Ciudad del Cabo, antiguo enclave estratégico para el control del pasaje entre el Océano Indico y el Atlántico.
Fotos: enviada especial Silvina Rosello
26/05/08
GACETA MARINERA
